viernes, 26 de julio de 2013

INESTABILIDAD DE HOMBRO. LUXACIÓN GLENOHUMERAL.


INESTABILIDAD DE HOMBRO

Ya que la cabeza del humero es más grande que el socket que la contiene, la glenoides (socket) tiene un anillo fibroso que la rodea llamado labrum, que hace mas profunda la superficie de contacto dando mayor estabilidad a la articulación. Además sirve como inserción de diversos ligamentos incluyendo la cápsula del hombro.

Aspecto del labrum o rodete, en donde se inserta la cápsula y la porción larga del bíceps


Las lesiones del labrum pueden deberse a traumatismos agudos o repetitivos. Un ejemplo de estos son las caídas con el brazo extendido y separado, caídas directas sobre el hombro, atrapando o cargando pesos súbitamente. Algunas actividades repetitivas como lanzar o cargar pueden dañar el rodete o labrum en el hombro. También la elasticidad aumentada de los ligamentos puede hacer inestable la articulación.
 La localización de las lesiones puede ser variada, ya sea superior, media o inferior o mixta, anterior o posterior. Las más frecuentes son la superior, llamada SLAP, que involucra la inserción del bíceps y la anterior, llamada Bankart, que se produce frecuentemente en las luxaciones anteriores del hombro.

Daño del labrum superior, en la zona del bíceps

El diagnóstico se hace mediante el interrogatorio y exploración física, lo cual determina la inestabilidad del hombro, pero  se podrá recurrir a estudios complementarios como resonancia magnética y/o artroscopia diagnóstica de oficina, en donde se puede definir con precisión el tipo de lesión y la planeación del tratamiento. Las radiografías son un complemento necesario, pero en ellas no se demuestran las lesiones de labrum por ser un tejido blando.

Una vez hecho el diagnóstico final, el medico indicará el tipo de tratamiento, que puede incluir medicamentos para dolor e inflamación, rehabilitación y reposo para aliviar las molestias. Si el tratamiento conservador no ha dado resultado, puede ser aconsejable realizar una cirugía artroscópica.  
Durante la cirugía se realiza un recorrido de la articulación para detectar las lesiones y hacer las reparaciones necesarias, como regularización de los bordes dañados, estimulación del tejido sano para provocar la cicatrización, reinserción del rodete y pliegue de la cápsula en caso de inestabilidad y reinserción del tendón del bíceps. Estos procedimientos se realizan mediante diversos instrumentos e implantes, como la radiofrecuencia, rasuradores, anclas, suturas, alambres, etc.

Labrum dañado en la luxación de hombro, reparado quirúrgicamente con 3 anclas.

Después de la cirugía es necesario usar un cabestrillo durante algunas semanas para proteger el hombro y evitar esfuerzos. Además le indicará su medico algunos ejercicios progresivos que completen progresivamente el movimiento. De acuerdo a las lesiones y las técnicas para su reparación, le será recomendada una terapia específica y dirigida por un fisiatra. 

vista de rayos X de tres anclas metálicas para labrum